El ayuno (abstenerse de comer), normalmente lo hacen las personas por una razón religiosa, espiritual o incluso política. Sin embargo, algunas personas empezaron a ayunar por motivos de salud, originalmente como método de “limpieza” del cuerpo.
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Sin embargo, más recientemente se ha descubierto que el ayuno puede aportar otros importantes beneficios para la salud.
Aunque la mayoría de las personas pueden ayunar durante un día entero de forma periódica y segura, no es posible hacerlo de forma frecuente. Por ello, algunos han adoptado un tipo de ayuno modificado, conocido como ayuno intermitente, para disfrutar de los beneficios del ayuno para la salud. Un formato popular de este tipo de ayuno es el llamado “16/8”, en el que sólo se come durante un periodo continuo de ocho horas de un día determinado (16 horas de ayuno por día). A continuación se comentan cuatro de los principales beneficios para la salud de los que se tiene constancia.
Ayuda a prevenir o tratar la diabetes de tipo 2
La diabetes de tipo 2 (también conocida como diabetes de inicio) se ha convertido en un grave problema de salud pública a gran escala. Esta enfermedad se produce cuando se tiene un nivel demasiado alto de azúcar en la sangre. Esto suele ocurrir por el consumo de demasiado azúcar combinado con la resistencia a la insulina (cuando el cuerpo produce cada vez más insulina para descomponer el azúcar en la sangre). Ambas condiciones dañan varias partes del cuerpo y pueden llegar a ser fatales.
Muchos estudios han demostrado que el ayuno intermitente reduce tanto los niveles de insulina como de azúcar en la sangre. Esto puede ayudar a prevenir que una persona se convierta en diabética y también ayudar a tratar la diabetes existente.
Puede reducir el estrés oxidativo y la inflamación
El estrés oxidativo se produce cuando se tienen demasiadas moléculas inestables en el cuerpo, conocidas como “radicales libres”. Los radicales libres reaccionan negativamente con otras moléculas importantes, como las proteínas y el ADN, y las dañan. Esto, a su vez, contribuye al envejecimiento general del organismo y a diferentes tipos de enfermedades crónicas. La inflamación es otra mala condición corporal que conduce a enfermedades como la artritis.
Los estudios han demostrado que el ayuno intermitente puede ayudar a combatir tanto el estrés oxidativo como la inflamación.
Ayuda a aumentar y mantener la salud del cerebro
Como se ha comentado anteriormente, los beneficios incluyen la reducción del estrés oxidativo, la inflamación, los niveles de azúcar en sangre y la resistencia a la insulina. Todos estos factores promueven un funcionamiento más saludable del cerebro. El ayuno también aumenta los niveles de una hormona cerebral llamada factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF). Una deficiencia de BDNF se asocia a menudo con la depresión y otros problemas relacionados con el cerebro.
Posible aumento de la esperanza de vida
Se ha demostrado que el ayuno es responsable de los siguientes cambios en el organismo
– Los niveles sanguíneos de la hormona del crecimiento humano (HGH) pueden aumentar drásticamente.
– El cuerpo induce importantes procesos de reparación celular, como la eliminación de material de desecho de las células.
– Se producen cambios beneficiosos en varios genes y moléculas relacionados con la longevidad y la protección contra las enfermedades.
Se han realizado estudios que demuestran que el ayuno aumenta en gran medida la duración de la vida de los animales de laboratorio. Aunque todavía no se ha demostrado que este efecto se aplique a los seres humanos, todos los beneficios demostrados para los humanos significan que quizás el ayuno intermitente podría ayudarle a vivir una vida más larga y saludable.