La apnea del sueño es, sin duda, una enfermedad grave del sueño en la que la respiración, de manera repetida, se detiene y vuelve a comenzar. Si una persona ronca fuerte mientras duerme o se siente fatigada incluso después de haber dormido toda la noche, esa persona podría estar sufriendo de apnea del sueño.
Tipos de apnea del sueño
Existen varios tipos de apnea del sueño que son los siguientes:
Apnea central del sueño: este tipo de apnea del sueño ocurre cuando el cerebro de una persona no envía señales adecuadas a los músculos que regulan el proceso respiratorio.
Apnea obstructiva del sueño: este es el tipo de apnea que ocurre cuando los músculos que protegen la garganta se relajan.
Síndrome complejo de apneas del sueño: este tipo de apnea del sueño, también conocido como apnea central del sueño emergente del tratamiento, surge cuando una persona tiene tanto apnea central del sueño como apnea obstructiva del sueño.
Si un individuo siente o nota que él o ella tiene apnea del sueño, lo más recomendable es que vaya al médico. Los medicamentos que se administran para aliviar este problema pueden ayudar a prevenir problemas cardíacos y todo tipo de alteraciones.
Cuándo ir al médico
El ronquido fuerte puede indicar, sin duda, un problema grave, pero no en todos los casos alguien con apnea del sueño puede estar roncando. Informa a tus médicos tan pronto como notes los síntomas de la apnea del sueño. O, mejor aún, si todavía no estás seguro de lo que podría estar mal contigo, simplemente pregúntale a tu médico qué tipos de enfermedades pueden dejarte cansado, inquieto y somnoliento.
Síntomas de la apnea del sueño
Este trastorno del sueño tiene muchos síntomas, pero los de las apneas obstructivas y centrales del sueño cambian, lo que dificulta saber qué tipo de trastorno padece una persona. Los síntomas más comunes de las apneas obstructivas y centrales del sueño son:
● Levantarse con la boca seca
● Tener dolores de cabeza temprano en la mañana
● Insomnio
● Recuperar el aliento mientras se duerme
● Ronquidos fuertes
● Incapacidad de poner atención al estar despierto
Efectos de la apnea del sueño
Apnea obstructiva del sueño
Sucede cuando los músculos de la parte posterior de la garganta se relajan. Estos músculos dan soporte al velo, al tejido de forma triangular que cuelga del velo, a las barreras facetarias de la garganta y la de la lengua.
Cuando los músculos se relajan, tu arteria se contrae o se cierra al inhalar. No puedes obtener suficiente aire, lo que puede reducir el nivel de oxígeno en tu sangre. Luego, tu cerebro detecta la incapacidad para respirar y te despierta inmediatamente para que puedas abrir tu arteria. Ese despertar es a veces tan transitorio que simplemente no la recuerdas.
Roncar, atragantarse o incluso tener dificultad para recuperar el aliento. Esto se repetirá de manera continua, lo que disminuirá tu capacidad para lograr las fases largas y relajantes del sueño.
Apnea central del sueño
Es el tipo menos común de apnea y sucede cuando el cerebro no transfiere señales a los músculos respiratorios. Lo que implica que tú simplemente no realizas ningún esfuerzo para respirar por un breve periodo de tiempo. Podría causarte despertar por falta de aire o tener dificultades para dormir o permanecer dormido.